Actores y actrices más relevantes de los sixtees en Inglaterra (II)

  Se habla poco del cine británico de los años 60, que representó el resurgimiento de una producción que había quedado eclipsada por las grandes películas de los años 50 hollywoodienses. Productores norteamericanos volvieron a interesarse por crear un nuevo cine en Gran Bretaña, el cine de los Sixtees (denominación de la década de 1960), con una forja de grandes actrices y actores que después fueron reconocidos a nivel internacional. 

Segunda parte de la anterior entrada, introduciendo otra actriz carismática de los 60's en el Reino Unido. Estaría en el cuarto lugar, JULIE CHRISTIE. He escogido este puesto no por su relevancia, sino por ser una de las principales figuras en el Londres de los años 60.

Julie Christie nació en la India, por razones laborales de su padre. Como ya de joven era muy inquieta, y la habían expulsado del colegio de Assam, regresó a Londres, y estudió en  Central School of Speech and Drama. 

Su gran año fue 1965, en el que realizó dos grandes y memorables filmes. Dr Zhivago de David Lean junto a Omar Sharif, el protagonista de la historia, y que significó su consagración comercial como actriz más carismática de esa década. Y Darling, bajo la dirección de John Schlesinger, uno de los hombres clave del nuevo cine inglés. Su interpretación como una modelo que vive con total intensidad sus relaciones con los hombres, en una sociedad marcada por el cambio de década, más permisiva y estéticamente muy marcada, sobretodo en las formas de vestir de la mujer moderna. Junto a ella -como ya cité en la anterior entrada- Dirk Bogarde está fantástico en su papel de un periodista, Robert que se enamora de Diana (Christie), hasta el punto de dejar a su esposa y a sus hijos, y vivir con ella. 

Pero la modelo, necesita probar cosas nuevas, porque se aburre de todo de forma rápida, y se busca otro amante, un magnate publicitario que la introduce en un mundo de juegos eróticos, y excentricidades del mundo de los artistas, pintores, diseñadores de la época (incluso se intuye que la hace participar de tríos, y de fiestas orgíasticas). Diana va y viene, es conocida internacionalmente. Pero siempre regresa con Robert, hasta que él se cansa de sus mentiras, y de ser utilizado cuando a ella le viene en gana, y la deja definitivamente. Diana conoce a un príncipe italiano, un viudo entrado en años, y se convierte en su esposa. Lo tiene todo, pero sigue estando aburrida, y se siente sola y vacía. 

La película empieza con la voz en off de Julie Christie, que está explicando su biografía a una reportera. Y durante el metraje, van introduciendo trozos de esta entrevista. Por Darling, la actriz ganó en 1965 un Oscar a Mejor actriz. 

Lejos del mundanal ruido fue otra de sus películas sonadas -por sus amoríos con Terence Stamp, uno de sus co-protagonistas-. No he visto esta cinta, pero si que puedo hablaros del remake de 2015, en el cual Carey Mulligan hizo el papel de Betsheba (el que Julie interpretó en 1967). Una mujer del siglo XIX que se convierte en terrateniente, y toma las riendas de su propia hacienda. Una mujer con caracter y obstinada, que se niega a casarse para no tener que ceder sus derechos al marido, aunque tiene locos a tres hombres: un propietario de tierras, un sargento, y el pastor que la ayuda desde hace años con los trabajos de la granja. 

ALBERT FINNEY formaba parte del grupo de los "bellos y malditos" del cine inglés de los años 60. Eran una generación de jóvenes actores que mitificaban un nuevo estilo de juventud, rostros distintos, asqueados de algo que no acababa de funcionar. Jóvenes seductores que se fraguaron en el mito de Chelsea. Finney fue descubierto por el cine británico de los sixtees al igual que otros jóvenes actores del grupo de los "malditos". 

El actor antepuso el teatro y realizó numerosas actuaciones en Birmingham de obras de William Shakespeare. En 1960 saltó a la fama en el Free cinema (equivalente a la Nouvelle Vague francesa) con una obra dirigida por Karel Reisz, y que tiene las características de esta corriente cinematográfica nueva: temática social rupturista, película independiente con bajo presupuesto, y denuncia un sistema económico opresivo y alienante. Sábado noche, domingo mañana me ha recordado Rebelde sin causa. Es la historia de Arthur, un joven de un barrio de clase obrera que vive para trabajar toda la semana en un torno, para disfrutar intensamente el sábado y el domingo, con su primo que es minero, bebiendo en el pub y liándose con su vecina casada (a la que deja embarazada), mientras tontea con su novia, con la que no quiere comprometerse formalmente.

El personaje tiene un claro síndrome de Peter Pan: no es responsable de sus actos, huye de los compromisos, le da igual lo que opinen los demás,no se somete a las normas sociales, hace gamberradas que no son propias de su edad, y todo ello bajo su único objetivo que es divertirse y "no estar muerto por dentro".

En 1962, rueda Tom Jones, comedia picaresca dirigida por Richardson sobre un guión d'Osborne, y creado por el novelista Henry Fielding. Las correrías del libertino bastardo Tom Jones, educado como un caballero durante el siglo XVIII, que le valió su primera nominación al Oscar. Defendida por la crítica como una joya que captura el espíritu de la época y que insufla la "pasión por vivir", ganadora del Oscar como mejor película. Críticos actuales consideran que es mediocre y que es incomprensible que ganase el galardon, cuando competía con grandes títulos muy mejores que Tom Jones. Según mi opinión, tiene puntos de ironía como el principio del filme, que está realizada en cine sin sonido, con música pegadiza y carteles con los diálogos. La utilización de un narrador es otro punto histriónico del texto. Para mi es una grotesca caracterización de la nobleza inglesa de època que tras pelucas y máscaras, y modales refinados, escondían los mismos deseos y vicios que cualquiera que se precie . Lo mejor: la escena de la erótica del manjar. 

Albert Finney vuelve a hacer un papel de chico malo, un "donjuan" británico con toques de humor, precedente y con similitudes a los Monty Phyton. 

Acabando la década de los 60, Finney volvio a ser reconocido por su papel co-protagonista junto a la gran Audrey Hepburn, en una historia sobre un matrimonio en horas bajas. Dos en la carretera (1967).

Otro de los reconocidos actores del grupo "bellos y malditos" de una belleza angelical, TERENCE STAMP que representaba el héroe de cualquier poeta del romanticismo anglosajón. 

Películas como El coleccionista (1965), Lejos del mundanal ruido (1967), Modesty Blaise (1966) y su papel de ángel en Billy Budd, lo convierten en un icono del Swinging London y la estrella para directores como Pasolini, Fellini y William Wyler.